Cómo se fabrican las vallas móviles profesionales
Las vallas móviles de metal provisionales sirven para acordonar con seguridad las zonas peligrosas de las obras o en eventos al aire libre como conciertos y festivales, marcan el perímetro y ayudan a dirigir el tráfico.
Puede que no sean las vallas más atractivas, pero probablemente son unas de las más prácticas.
Fabricación de la Valla Móvil
Todo comienza con una bobina gigante de 7 km de alambre de acero galvanizado. Una máquina llamada estiradora desenrolla la bobina y como su propio nombre indica estira el alambre. La máquina de alambre utiliza una cuchilla industrial para cortar los trozos de la longitud necesaria para fabricar los paneles de la valla.
En la sección de soldadura automática, un brazo magnético coge las varillas horizontales del panel y las coloca una a una en posición sobre las varillas verticales. Ahora comienza la soldadura. Este tipo de soldadura se llama soldadura eléctrica donde se aplica una fuerte corriente eléctrica sobre las juntas que funde las piezas uniendo las varillas horizontales con las verticales. Este tipo de soldadura es más limpia y más rápida que la soldadura tradicional. En el siguiente proceso una prensa automática hace unos plegados en determinados puntos clave. Con esto, se consigue más rigidez y por tanto más resistencia.
En el último paso, se coloca un poste redondo de acero galvanizado a cada lado del panel y un operario suelda estos postes a los paneles. Uno en cada extremo de la malla.
Cuando llegue el momento de levantar la valla, solo habrá que colocar cada panel sobre las bases de hormigón que irán en el suelo
Todos los componentes de la valla móvil provisional para obras se fabrican con acero galvanizado, lo que significa que este panel móvil es muy resistente, no necesita mantenimiento y no se oxida